Después de las celebraciones del otro día hoy vuelvo con otra historia recién terminada que creo merece la pena.
Antes de nada quiero comentaros que es la primera vez que me encuentro con una sinopsis que no hace justicia al libro. De hecho después de ojearla pensé ¿Y para qué me voy a leer el libro si ya me lo has explicado todo? El mundo de las reseñas y las sinopsis los considero muy importantes porque de ello dependerá que tu libro se lea o no. Hay quien se deja llevar por la portada, por el escritor, por el título... pero sea lo que sea que te llame la atención cuando paseas por una librería (física o virtual) el segundo paso es darle la vuelta al libro y ojear de qué va. ¿No? Por eso creo que es esencial una buena presentación de la historia y os aseguro que en este libro no se ha tenido en cuenta. No es que mienta... No miente para nada pero... digamos que es bastante simple y el libro es mucho más que lo que nos resume el encargado o la encargada de dicha sinopsis.
También os reconozco que lo que me movió a empezar una historia que ya veía como terminada por su resumen fue que la protagonista formara parte de una comunidad Amish. Siento mucho interés por este tipo de pueblos anclados en siglos pasados y me llama muchísimo la atención sus costumbres, maneras y formas de vida.
Dicho esto os cuento que Hannah es una chica Amish, que tras cumplir 16 años, momento en el que cambia su vida porque ya se considera casadera, se enamora de un reportero encargado de hacer un reportaje a su comunidad. Un amor imposible que le traerá graves consecuencias y cambiará el rumbo de su vida.
Si os llama la atención como a mi ya no necesitáis saber más de esta historia. Tiraos de lleno a la piscina de su lectura y después leerla podéis comprobar si lo que os digo es verdad o no... ¿Está todo explicado o no en esa sinopsis? Yo creo que no... Dímelo tú.
Hasta entonces me despido!
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